Víctor Gabriel Beras con casi cien años y más de sesenta de servicio languidece a la espera de pírrica pensión

Por Santo Domingo Guzmán
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Tras ser nombrado, primero como escribiente en la administración pública por el entonces dictador Rafael L. Trujillo Molina el 29 de octubre de 1950, Víctor Gabriel Beras Sosa se debate entre la más absurda pobreza en su residencia de la calle Francisco del Rosario Sánchez número 375, sector Guachupita de la capital.

Pese a varias solicitudes dirigidas al presidente de la Suprema Corte de Justicia, doctor Jorge Subero Isa, donde le solicita la pírrica pensión que por ley le corresponde y las cuales fueron fechadas, una en fecha 15 de septiembre del 2000 y la otra el 11 de julio del 2002, aun espera por que se cumpla con él por los más de sesenta años de servicios prestados al Estado dominicano.

Beras Sosa sirvió en la administración pública como sirviente de mayordomía del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, escribiente de la Procuraduría Fiscal de la Segunda Cámara Penal del Distrito Nacional, empleado del taller de ebanistería y carpintería de la Dirección Administrativa de la Dirección de Bienes Nacionales.

También alguacil ordinario del Juzgado de Paz de la 5ta. Circunscripción del Distrito Nacional, alguacil de Estrado de la 4ta. Cámara Penal del Distrito Nacional, Alguacil ordinario de la Cámara Civil y Comercial de la 2da. Circunscripción del juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional.

En 1992 fue depurado por la Honorable Suprema Corte de Justicia, siendo repuesto como alguacil Ordinario de la Cámara Civil y Comercial de la 2da. Circunscripción del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional, lo cual ocurrió el 4 de junio.

El señor Beras Sosa posee un expediente completo de todos los nombramientos, en los que figuran las firmas de los entonces presidentes Rafael L. Trujillo Molina y Joaquín Balaguer Ricardo, documentos estos que conserva intactos, copias de los cuales ha anexado a las solicitudes que ha enviado al presidente de la Suprema Corte de Justicia.

El señor Víctor Gabriel Beras Sosa apela al presidente de la República, doctor Leonel Fernández Reyna y a la Primera Dama de la República, doctora Margarita Cedeño de Fernández, a fin de que se le reconozca el servicio prestado al Estado dominicano con una pensión.

Es una vergüenza como pueden ocurrir este tipo de injusticias en un país y en un tiempo como el que vivimos y con un presidente que se dice garante de los derechos de los seres humanos.

Víctor Gabriel Beras Sosa nació el 25 de diciembre del año mil novecientos diecisiete.