Por BONAPARTE GAUTREAUX PIÑEYRO
Don Emilio Rodríguez Demorizi me comentaba una vez "en política hay que saber barrer para adentro" este gobierno no aprendió la lección, recoge la basura pero no sabe dónde colocarla, por ello sus funcionarios exhiben tanta riqueza obtenida súbitamente, porque saben que para ellos no hay sanción.
Aquellos que "llegaron en chancletas y salieron en yipetas" exhiben un bienestar insultante a la inteligencia y a la moral de la sociedad. Cuando Nuria Piera publicó imágenes de la casa de campo de Alejandrina Germán y se extrañaba de la falta de correspondencia entre el sueldo de la funcionaria y el costo de la casa, se destapó la caja de Pandora. Habrá que averiguar quién colocó la tapa en su lugar.
Hay funcionarios a quienes todos conocemos, que no tuvieron un abuelo rico que les dejara en herencia los millones que exhiben. Un grupo de ellos tiene residencias contiguas, algunas de las cuales incluyen salas de cine.
El enriquecimiento es tal que lo demuestran en la ropa y calzados, relojes, anillos y otras prendas, con las casas de veraneo, los gastos en restaurantes y toda suerte de diversiones, sin detenerse a mirar los precios.
Otros tienen el descaro de construir viviendas en exclusivos sectores de playa tan lujosas y grandes que llaman la atención de millonarios tradicionales.
La compra de viviendas o apartamentos en La Florida está a la orden del día. Allí se pueden tener automóviles de marcas muy caras, pues llaman menos la atención que si circularan aquí.
Amigos del Presidente y funcionarios de su gobierno le han señalado al mandatario la comisión de actos de corrupción cometidos por funcionarios. Se desconoce si han sido investigados.
Ahí están los sonados casos que todos conocemos sin que autoridad alguna tome la iniciativa de investigar el origen de las fortunas que se exhiben de manera insultante.
¿Quién conocía como rico a la mayoría de los miembros del Gabinete presidencial, antes de que llegaran al poder en 1996?
¿Quién conocía como rico a personas que ahora tienen casas en lugares tan exclusivos como Casa de Campo, para citar un ejemplo, u otros que ahora son dueños de lugares de veraneo en las montañas, residencias de costa en playas donde el metro de terreno se vende en dólares?
¿Cuánto gana un Secretario de Estado que le permite tener en pocos meses bienes de fortuna que le facilitan no trabajar cuando su partido está fuera del poder?
Si el departamento de prevención de la corrupción no sabe cómo se hacen las cosas que copie de la Suprema Corte de Justicia que acaba de sancionar a un juez, entre otras cosas, porque sus cuentas bancarias no se correspondían con sus ingresos legales.
Por supuesto, para ello falta voluntad y en el gobierno la voluntad de actuar con honestidad está de vacaciones, en muchos casos.
Cortesía de William Jerez
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